martes, 18 de septiembre de 2007

ROCKSTAR SYSTEM

Con motivo del lanzamiento en DVD de "Last days" (biopic de Kurt Cobain) y el inminente estreno de "I'm not there" (basada en la vida de Bob Dylan), la revista Primera Línea me ha encargado un artículo sobre la sociedad que conforman Cine y Rock. Aquí va un adelanto, el resto, próximamente en los quioscos.




HOLLYWOOD ROCKS!
El cine y el rock estaban condenados a entenderse. Primero fue Elvis con sus movimientos pélvicos, coreografías carcelarias y collares hawaianos de flores. Después unos autoparódicos Beattles, sentando las bases de la estética pop a las órdenes de Richard Lester. Pero la verdadera revolución llegó cuando Milos Forman retrató a Mozart como un díscolo punk rocker con mas excentricidades que Michael Jackson. Oliver Stone repetiría la misma fórmula para redescubrir a los Doors en la década de los noventa, provocando una injustificada invasión de recopilatorios que aún continúa. Vidas contadas en dos horas. Los biopics funcionan. Así lo demuestra el reciente éxito de Ray Charles en Ray, Johnny Cash en Walk the line (ambas con Oscar incluido) y, en menor medida, Kurt Cobain en Last Days.
La revisión de las dudas existenciales del líder de Nirvana, a cargo del irregular Gus Van Sant, dio el pistoletazo de salida a una colección de biopics impensables. Desde el incombustible Iggy Pop a la sugerente Debbie Harry, pasando por los gamberros Mötley Crue (con Tommy Lee a la cabeza) o los tediosos Milli Vanilli (seguro que en tus peores pesadillas están presentes sus trenzas y camisas violetas con hombreras). Preparate, porque las salas de cine van a llenarse de groupies pidiendo los bises.

Una de las propuestas más interesantes a priori es The Passengers, biopic basado en los primeros años de Iggy Pop al frente de los Stooges. Un retrato de la generación de los setenta en Detroit donde, a buen seguro, no escatimarán en drogas, maquillaje, ambigüedad sexual y rock, mucho rock. Se rumorea que en la fase inicial del proyecto, la iguana sexagenaria se quejó al saber que el hobbit Elijah Wood le daría vida en el celuloide, aunque no sabemos si se dio media vuelta bajándose los tejanos hasta los tobillos, como habitúa a hacer Iggy en señal de protesta. Curiosamente, otro de los rostros más populares de la saga de “El señor de los anillos”, Cate Blanchett, hará lo propio con el último ganador del premio Príncipe de Asturias, Bob Dylan, en I’m not there.

El autor de “Knockin’ at Heaven’s Doors” ya plantó a Joan Baez en los sesenta y, cosas del destino, ahora será encarnado por una mujer. El español Agustín Díaz Yanes ya intentó la misma jugada en su adaptación de “Alatriste”, aunque con peor suerte. Ver a Blanca Portillo en la piel del inquisidor Bocanegra infundía de todo menos miedo, pues era inevitable pensar que en cualquier momento aparecería Sole para soltarle una colleja. Son los riesgos del encasillamiento, y sino que pregunten a Corie Feldman, Audrey Tautou o cualquier miembro del reparto de Verano Azul.
Tal vez por este motivo, Kirsten Dunst quiere ser recordada para lo posteridad como algo más que la novia de Spiderman y se ha decidido a inmortalizar en la gran pantalla a Debbie Harry: ex conejita Playboy, musa de John Waters y líder del grupo Blondie. Todo un icono viviente del rock, al igual que Janis Joplin. Gospel according to Janis será el segundo biopic basado en la musa de Woodstock después de “The Rose”(1979). En aquella ocasión Bette Midler encarnó de forma convincente a la fallecida Rosa Negra y, en esta nueva revisión del mito, se pensó en la omnipresente Scarlett Johansson o Lindsay Lohan, esa gran diva de la banalidad. Si la juventud de Janis estuvo marcada por las drogas, el alcohol y otros excesos, la vida personal de Lohan no tiene nada que envidiar y la ex chica Disney está haciendo méritos para protagonizar su propio biopic junto a su compañera de juergas, Britney Spears. Si Walt levantase la cabeza y contemplara a semejantes trasnochadas se quedaría tal y como está: helado.
OTROS TÍTULOS

- CONTROL (Anton Corbjin). El afamado realizador de los videclips “Personal Jesus” (Depeche Mode) o “Heart-Shaped box” (Nirvana) debuta como cineasta en este biopic con nombre de preservativo basado en el malogrado Ian Curtis, con quien trabajó personalmente como fotógrafo. Sam Riley emula al líder de Joy Division, víctima de ataques epilépticos y convertido en un icono al ahorcarse con 23 años mientras escuchaba la canción “The idiot” de Iggy Pop.

-DEEP IN DREAM. Josh Harnett interpretá a Chet Barker. Trompetista cool, adicto a la heroína y fallecido en la más absoluta de las miserias a finales de los 80.

- THE DIRT. Biografía de los hard rockeros Mötley Crue contada por sus propios protagonistas Mick Mars y Tommy. Dirigida por Larry Charles, ingenioso guionista de la serie Seinfeld, el veterano actor Christopher Walken se vestirá de su compañero generacional Ozzy Osbourne y Val Kilmer hará lo propio con David Lee Roth.